martes, 31 de enero de 2012

El amor

El amor constituye un tema de índole filosófica; tanto desde el punto de vista de su existencia como un objeto abstracto de la conciencia humana, como desde el punto de vista de su abstracción como un concepto propio, independiente de la persona humana.
En casi todos los filósofos griegos existen referencias al amor, entendiéndolo como el principio cósmico que gobierna la unión de los elementos naturales. Entre los antiguos griegos, fue Empédocles el primero que hizo referencia al amor, considerándolo como uno de los principios que batallaban en el cosmos y que propendía a la unión de lo elementos integrantes del Universo.
Platón distinguía tres clases de amor, el del cuerpo, el del alma, y un tercero que reunía a ambos. Consideraba que el amor es una oscilación entre poseer y no poseer; y que el amor hacia las cosas concretas es un reflejo del amor a la belleza absoluta, la idea de lo bello. El amor verdadero permitía al alma ascender hacia la contemplación de lo ideal y eterno. Concepto del cual emana la expresión coloquial amor platónico para referirse al amor idealizante del ser amado.
Naturalmente, en la filosofía de los escolásticos cristianos - especialmente en San Agustín y Santo Tomás de Aquino - el tema del amor fue tratado en un enfoque fuertemente teológico; identificado con la caridad e incorporado con la y la esperanza, en las tres virtudes teologales.
El amor humano, analizado como una manifestación de la espiritualidad, fue analizado desde el punto de vista filosófico especialmente a partir del Renacimiento; por filósofos que lo consideraron una de las pasiones del alma, suscitándose tres cuestiones:
·         Si el amor es puramente subjetivo, en cuanto a si se trata simplemente de un proceso cumplido en quien ama; o si en él participan las cualidades y valores del ser amado.
·         Si es resultante exclusivamente de una estructura psicológica - basada en procesos fisiológicos - o tiene una autonomía respecto de ellos.
·         Si constituye un proceso inalterable y alcanza un estado permanente; o si es una mera invención humana y fundamentalmente una creación literaria.
Filósofos modernos - como von Brentano - se han ocupado del tema del amor desde el punto de vista filosófico, sustentando que es un proceso intencional, que trasciende del amador al amado, que es amado en cuanto se le valora en forma positiva. Distingue el amor de la compasión y la piedad, porque en cuanto acto intencional tiene leyes propias, que no son psicológicas sino axiológicas; es decir, relativas a la teoría de los valores. El amor es un acto personal, que se manifiesta eligiendo o rechazando valores; siendo en este último caso, el odio. En definitiva, el amor no es arbitrario sino selectivo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario